Día 8. En apariencia, mi cara sigue igual, sin embargo he notado un enrojecimiento de la misma y algunos granos nada preocupantes sobre mi rostro, en especial, los cachetes. Nada del otro mundo. En mi pecho han salido muchas, pero muchas espinillas de esas minúsculas así como una erupción, y la espalda, pues igual de dañada. Es muy temprano para hablar de progreso, pero con respecto a días anteriores, no veo la gran vaina. Mi cara el día de ayer estuvo muy bien, pero todo es tolerable. También noté que mi boca no se secó tanto como ayer, ¿será porque no salí nada el día de hoy? Habrá que ver...
Día 9. Mi cara se ve muy bien prácticamente. Los granos preocupantes no son la gran vaina, pero en mi espalda me han brotado algunos bastantes fastidiosos que me hacen pensar dos veces antes de usar una franela blanca. Los labios siguen resecos. Todo en orden relativamente...
Día 10. Algunos granos ya pequeños sin importancia en mi cara, uno se cayó solo, dejó una cicatriz más de esas pequeñas (no se infectó) y sé que al final desaparecerá. Del resto nada del otro mundo, la cara roja, pero los barros pequeños y uno que otro. Los de los costados de la cara de hace una semana ya lo que quedan son las marcas y el recuerdo. La espalda no presenta mejoría aparente.
Día 11. Se vuelve tedioso escribir, ya que sin novedades que reportar no provoca, pero compromiso es compromiso. Así que simplemente diré que el cambio de hoy no le veo diferencia con ayer... gracias a Dios, prefiero que me de fastidio el tener que reportar la escasa novedad que me aparezca la "novedad" más temida: El rebrote. Así que aquí seguimos. Por cierto, hoy me comí unos pasapalos (tequeñitos, empanaditas), que obviamente se fríen en aceite y no me cayeron mal ni me provocaron brotes aún... no es para abusar tampoco.
Días 12, 13 y 14. Mi cara se ve muy bien con respecto al primer día. Y eso que no estoy usando nada de tratamientos tópicos. Mi espalda tiende a secar los granos grandes y los pequeños se quedan así como están. Muchos puntos negros en mi nariz imperceptibles a más de 3 metros de distancia. Si he notado caspa, pero nada del otro mundo.
Resumen
Esta semana si cometí pecados, comí en lugares de comida rápida 2 veces (Mc Donald's y Burger King), lo admito, es un error, pero no tenía de otra ya que mi trabajo requiere de estar en la calle y estuve apurado. Por favor no caigan en eso. Esta semana me ha sido muy provechosa a pesar de que no noto nada inusual, si veo mejorías, y lo digo, porque ya están casi desaparecidos los granos que publiqué en las fotos de la primera semana, interesante, pero ahí vamos. He pecado también en olvidar colocarme las lágrimas artificiales y dan dolores de cabeza, cuando me las pongo, al rato, santo remedio. Mis labios si están resecos para el momento que les escribo y eso sí, Chapstick y adiós a la resequedad... por el momento... Bebo más agua que antes (siento más sed y ganas de orinar también), nada de cansancio, NADA DE BROTES AUN (Gracias a Dios y que se quede así), y bueno, así estamos para hoy.
Hasta la próxima semana, veamos si puedo arreglar la cámara para hacer otro vídeo... Que esten bien y gracias por los comentarios, los estaré procesando en breve.
miércoles, 25 de junio de 2008
miércoles, 18 de junio de 2008
Semana 01
Como lo prometí, aquí empieza el relato semanal. Espero le puedan sacar provecho.
Día 1. Me tomé la pastilla, es pequeña la cápsula, dice ROA 20mg y bueno me la tomé después de pensarlo como dos minutos. A la hora no sentí nada, obvio, ni que fuera mágico esto. Pero bueno, la primera de tantas. Les dejo una foto de la pastilla.
Día 2. Desde temprano he sentido como que me hubiesen brotado más espinillas. Son pequeñas, con su pus y su parte sólida, aunque son tolerables, son de los que yo, me hubiese sacado a punta de uña. Pero lo evito... Es un tanto molesto volver a sentir mi cara "puyúa", pero sé que esto no es nada. Ya veremos. Quizás lo de este brote tan bobo sea pura sugestión mía después de leer tantos comentarios en foros y demás.
Día 3. Desperté tarde, pero con los ojos secos. Los labios nada aún, las viejas inflamaciones van normal, al final del día, con la inevitable tocadera de las lesiones han ido cediendo y cayendo después de estar muy secas. Me tomé unas fotos, demostrando que gracias a la luz incandescente de la cámara se ven muy inflamadas, pero a simple vista no se ve tan grave. Yo, sin embargo, no me siento acomplejado ya que pasé por verme al espejo muchas veces cuando tenía 14 y 15 años y créanme, estaba mucho peor. También he notado que en mi entrecejo han salido tres espinillas más, nada del otro mundo. Y mi espalda sigue igual, enrojecida, y los granos grandes pareciese que estuviesen secando, pero me parece que es pura sugestión mía, es muy pronto aún.
Anexo Fotos:
Día 4. No he visto mayor diferencia en mi cara, a excepción de algunos granos muy pequeños fácilmente extirpables en mi entrecejo. De hecho sin meter uña salieron dos, que se infectaron rápidamente y se volvieron a llenar de sebo. Del resto, igual, alguna picazón que otra y mis labios están un poco más secos que lo común, pero no lo noto casi gracias al uso constante del Chapstick. En mi espalda, razón por la cual me recetaron este medicamento, noto que los granos que estaban grandes se sienten más secos, no dolorosos. Será cuestión de días verlos caer.
Día 5. Un tanto igual o mejor que el día anterior. No he presentado resequedad alguna, y quizás sea, por sugestión, que los noto más secos mis labios, pero tampoco al punto de resquebrejarse ni nada. Alguna mucosidad sólida salió con sangre, pero esto ya me había pasado antes del tratamiento. Mi espalda se nota mejor, rojísima con las espinillas pequeñitas, y las grandes están como secas ya. La cara está bien y los granos pequeños del entrecejo se ven con tendencia a caerse solos.
Día 6. Todo el día estuve chequeando regularmente los posibles granos por salir. Qué ladilla es estar teniendo cuidado al afeitarme y prefiero dejarme la barba que cortar accidentalmente alguno de esos granos, pequeños, pero altamente infectables. Tengo algunos granos pequeños con "material" bajo la barbilla pero tienen toda la pinta de caerse solos. Nada del otro mundo. Los labios si tienden a secarse más que antes. Hasta ahora no ha habido mayor cambio.
Día 7. Día de las mejorías, noté una mejora bastante notoria en los costados de mi rostro, aquellas que se veían rojas en el día 3, y a pesar de, que me afeité hoy la barba y se cortaron un "poquitico", no denota infección alguna. Los del entrecejo ya no están, sino las marcas. Y mi boca si se siente reseca aunque de vista no lo parezca.
Día 1. Me tomé la pastilla, es pequeña la cápsula, dice ROA 20mg y bueno me la tomé después de pensarlo como dos minutos. A la hora no sentí nada, obvio, ni que fuera mágico esto. Pero bueno, la primera de tantas. Les dejo una foto de la pastilla.
Día 2. Desde temprano he sentido como que me hubiesen brotado más espinillas. Son pequeñas, con su pus y su parte sólida, aunque son tolerables, son de los que yo, me hubiese sacado a punta de uña. Pero lo evito... Es un tanto molesto volver a sentir mi cara "puyúa", pero sé que esto no es nada. Ya veremos. Quizás lo de este brote tan bobo sea pura sugestión mía después de leer tantos comentarios en foros y demás.
Día 3. Desperté tarde, pero con los ojos secos. Los labios nada aún, las viejas inflamaciones van normal, al final del día, con la inevitable tocadera de las lesiones han ido cediendo y cayendo después de estar muy secas. Me tomé unas fotos, demostrando que gracias a la luz incandescente de la cámara se ven muy inflamadas, pero a simple vista no se ve tan grave. Yo, sin embargo, no me siento acomplejado ya que pasé por verme al espejo muchas veces cuando tenía 14 y 15 años y créanme, estaba mucho peor. También he notado que en mi entrecejo han salido tres espinillas más, nada del otro mundo. Y mi espalda sigue igual, enrojecida, y los granos grandes pareciese que estuviesen secando, pero me parece que es pura sugestión mía, es muy pronto aún.
Anexo Fotos:
Lado Izquierdo de la cara
Lado Derecho de la cara
Lado Derecho de la cara
Día 4. No he visto mayor diferencia en mi cara, a excepción de algunos granos muy pequeños fácilmente extirpables en mi entrecejo. De hecho sin meter uña salieron dos, que se infectaron rápidamente y se volvieron a llenar de sebo. Del resto, igual, alguna picazón que otra y mis labios están un poco más secos que lo común, pero no lo noto casi gracias al uso constante del Chapstick. En mi espalda, razón por la cual me recetaron este medicamento, noto que los granos que estaban grandes se sienten más secos, no dolorosos. Será cuestión de días verlos caer.
Día 5. Un tanto igual o mejor que el día anterior. No he presentado resequedad alguna, y quizás sea, por sugestión, que los noto más secos mis labios, pero tampoco al punto de resquebrejarse ni nada. Alguna mucosidad sólida salió con sangre, pero esto ya me había pasado antes del tratamiento. Mi espalda se nota mejor, rojísima con las espinillas pequeñitas, y las grandes están como secas ya. La cara está bien y los granos pequeños del entrecejo se ven con tendencia a caerse solos.
Día 6. Todo el día estuve chequeando regularmente los posibles granos por salir. Qué ladilla es estar teniendo cuidado al afeitarme y prefiero dejarme la barba que cortar accidentalmente alguno de esos granos, pequeños, pero altamente infectables. Tengo algunos granos pequeños con "material" bajo la barbilla pero tienen toda la pinta de caerse solos. Nada del otro mundo. Los labios si tienden a secarse más que antes. Hasta ahora no ha habido mayor cambio.
Día 7. Día de las mejorías, noté una mejora bastante notoria en los costados de mi rostro, aquellas que se veían rojas en el día 3, y a pesar de, que me afeité hoy la barba y se cortaron un "poquitico", no denota infección alguna. Los del entrecejo ya no están, sino las marcas. Y mi boca si se siente reseca aunque de vista no lo parezca.
Conclusión de la primera semana:
Pues amigos, hasta la próxima semana. Espero que pronto, pueda subir otro video a la cuenta de YouTube.
- No todos somos iguales, yo, por lo menos ahora, no he visto ningún efecto secundario digno de preocuparse.
- No se toquen los granos, y si lo hacen, favor lávense la cara o intenten desinfectarlos con alcohol y desistan de tocarse.
- Nunca dejen en casa, si salen, el protector labial, el protector solar, ni las lágrimas artificiales, nunca sabes cuándo las necesitarías.
- No desesperes, piensa a futuro. Pero tampoco te confíes, que esto es más impredecible.
Pues amigos, hasta la próxima semana. Espero que pronto, pueda subir otro video a la cuenta de YouTube.
miércoles, 11 de junio de 2008
Pre-tratamiento y presentación de los medicamentos
Pues sí, hablé con los doctores y no fui difícil de convencer. Tengo que cumplir 6 meses de tratamiento, que sé que se irán rápido y podré salir de una vez de esta pesadilla constante llamada acné. Mi tratamiento consiste en:
- Roacután de 20mg, 1 diaria por un mes con el almuerzo: Me iban a recetar 40mg, pero como apunté mi temor al rebrote me recomendaron 20 primero no sé, será para que mi cuerpo se vaya acostumbrando y no sea fulminante. Eso se los iré relatando en el transcurso de este diario-blog.
- Chapstick o crema de cacao en los labios siempre, a cada rato.
- Jabón Dermotivin en las noches y en las mañanas.
- Tres veces al día deberé colocarme lágrimas artificiales.
Hoy compré los medicamentos, no fueron económicos, aunque eso ya lo sabía, tantos años comprando medicamentos tópicos que eran costosos, estos debían por lo menos doblar el precio. El Roacután me costó BsF 165, que eso debe ser, al dólar oficial unos US$77 aprox. Trae 30 pastillas. Las lágrimas artificiales costaron BsF 7,00 que son algo más de US$3, el jabón cuesta unos 8 dólares y el protector solar unos 25 dólares, para no seguirlos mareando con nuestra moneda devaluada.
A continuación les dejo unas fotos que le tomé a los productos que mañana, 12 de junio, día que recordaré por este cambio que estoy asumiendo, comenzaré:
Esta es la caja que contiene el medicamento:
Aquí están las pastillas contenidas junto a su caja:
Y todos los medicamentos que usaré, descartando ya la Doxiciclina (que me quedaba una pastilla) y la Zudenina, que hoy, será la última vez que la utilice.
Pues aquí dejo esta entrada, hoy aproveché y me tomé mis últimas dos cervezas con alcohol de este año, sniff sniff, pero sé que más pronto que tarde volveré a mis andanzas.
Mañana es el día 1, y el próximo miércoles 18 de junio les relataré cómo me fue la primera semana, con pelos y señales. Hasta entonces.
PD: He logrado grabar un video blog también y trataré de seguirlo tal cual este blog lo está haciendo. Gracias a la tecnología no hay de qué preocuparse, además subtitulé el video al inglés para que gente de no habla hispana pueda entender... veamos qué tal va la cosa:
- Roacután de 20mg, 1 diaria por un mes con el almuerzo: Me iban a recetar 40mg, pero como apunté mi temor al rebrote me recomendaron 20 primero no sé, será para que mi cuerpo se vaya acostumbrando y no sea fulminante. Eso se los iré relatando en el transcurso de este diario-blog.
- Chapstick o crema de cacao en los labios siempre, a cada rato.
- Jabón Dermotivin en las noches y en las mañanas.
- Tres veces al día deberé colocarme lágrimas artificiales.
Hoy compré los medicamentos, no fueron económicos, aunque eso ya lo sabía, tantos años comprando medicamentos tópicos que eran costosos, estos debían por lo menos doblar el precio. El Roacután me costó BsF 165, que eso debe ser, al dólar oficial unos US$77 aprox. Trae 30 pastillas. Las lágrimas artificiales costaron BsF 7,00 que son algo más de US$3, el jabón cuesta unos 8 dólares y el protector solar unos 25 dólares, para no seguirlos mareando con nuestra moneda devaluada.
A continuación les dejo unas fotos que le tomé a los productos que mañana, 12 de junio, día que recordaré por este cambio que estoy asumiendo, comenzaré:
Esta es la caja que contiene el medicamento:
Aquí están las pastillas contenidas junto a su caja:
Y todos los medicamentos que usaré, descartando ya la Doxiciclina (que me quedaba una pastilla) y la Zudenina, que hoy, será la última vez que la utilice.
Pues aquí dejo esta entrada, hoy aproveché y me tomé mis últimas dos cervezas con alcohol de este año, sniff sniff, pero sé que más pronto que tarde volveré a mis andanzas.
Mañana es el día 1, y el próximo miércoles 18 de junio les relataré cómo me fue la primera semana, con pelos y señales. Hasta entonces.
PD: He logrado grabar un video blog también y trataré de seguirlo tal cual este blog lo está haciendo. Gracias a la tecnología no hay de qué preocuparse, además subtitulé el video al inglés para que gente de no habla hispana pueda entender... veamos qué tal va la cosa:
Introducción (II): Tratamientos tópicos y antibióticos recetados
No fue sino hasta que tuve 15 años, a punto de cumplir 16, que me animé a ir al dermatólogo. Tenía años sin ir, desde que tenía 11 años cuando sufrí de una pitiriasis rosada. 2 años aquejándome de mi cara, que estaba, horripilante, y no era un acné severo de esos quísticos, era de uno moderado que se trataba sólo con algún antibiótico temporalmente y puro tratamiento tópico.
Recuerdo bien la fecha, 26 de agosto de 2003, mi esperanza de mejorarme me llenó de optimismo sin aún tener lo que me recetó la doctora que me tocó en aquella ocasión:
- Tremesal de 100mg, 2 veces al día por 1 mes y después 1 diaria por 2 meses.
- Benzac (Peróxido de Benzoilo) crema al 5% todas las noches.
- Jabón Neutrógena, especial para pieles grasosas (uno de etiqueta naranja).
- Umbrella Gel SPF30.
Pues al mes, había mejorado notablemente, y al cabo de dos meses más (la cita la tuve bien lejos) había mejorado, pero, aproximadamente 15 días antes de la cita pautada, en mi familia hubo una situación económica delicada, la cual, no nos permitió costear la crema Benzac, la cual era algo costosa para aquel entonces y estuve ese tiempo sin ponérmelo (ya para entonces no me tomaba la pastilla Tremesal). Surgió un rebrote feo, el cual, cuando tuve la cita con mi doctora el 18/12/2003 me recetó Benzac al 10% y otra crema diurna que no recuerdo ahorita su nombre.
El año 2004 fue de mil maravillas para mí, estaba graduándome de la secundaria, y mi cara estaba de un bien que ni les cuento, por lo menos los primeros 10 meses. Como ya mi acné se había reducido a un mínimo perfectamente tolerable, el tratamiento dejé de usarlo pausadamente. Mi dermatóloga sólo me recomendó usar el peróxido de benzoilo únicamente cuando saliese un grano, del resto no hacía falta sino la crema diurna y el protector solar.
Ese año 2004, tuve apenas dos citas, el 11 de marzo y el 11 de mayo, las cuales fueron normales y el tratamiento no lo recuerdo perfectamente pero sé que fue como lo describí en el párrafo anterior. Sin embargo, mi dermatóloga quería tenerme seguimiento al caso y me citó nuevamente para el 9 de agosto. Ese día, de tan mala suerte para mí, y por mala costumbre de dejar todo para última hora, extravié mi tarjeta de las citas del hospital, y yo, empecé a buscarla justo una hora antes de la referida cita. Como no la conseguí, simplemente lo dejé así y no fui a la cita, confiado ya, que mi cara estaba "bien", relativamente en comparación a como estaba antes.
Para el hospital, no volví más, no por falta de tiempo, sino por flojera y por ser confianzudo. Empecé los estudios en la universidad y a la semana se me presentó un rebote, monumentalmente preocupante, pero en vez de pedir cita, volví a comprar los remedios de las citas anteriores y se fueron aplacando lentamente, tomé las pastillas sin prescripción alguna ya que aquí las venden así y bueno al cabo de tres meses, en enero de 2005, estaba relativamente bien con respecto a los tres primeros meses de la universidad (octubre-diciembre).
Todo el año 2005 me la mantuve ocupado, y mis tiempos libres se los dedicaba a ver películas, tomar con mis amigos, lo normal, mi cara no fue factor preocupante hasta finales de ese año. Al notar que ya las pastillas no hacían efecto, dejé de tomarlas y me embadurnaba la cara con el Benzac al 5% que me ardía pero sí medio controlaba la cosa. A mediados de enero del 2006 creo que tuve el peor rebrote jamás visto a mi parecer, horrible a los lados de mi cara grandes, de tal forma que ni me podía afeitar porque siempre le sacaba un tajo a algún grano, Dios que frustrante todo eso, y sobre todo por la gente preguntando y "recomendando".
Tuve mi cita en febrero, me tocó otro doctor y bueno me recetó Doxiciclina de 100mg, Solugel al 0.4% creo que era y para las marcas grandes Stievamycin al 0.025% (color vinotinto la franja de la caja y tubo). Al cabo de 3 meses había mejorado, y había irrespetado la toma del antibiótico que era cada 12 horas por las farras y la tomadera de cerveza, todo eso hasta la próxima cita que fue a finales de abril del 2006.
Como mi mejoría fue buena, el doctor prosiguió con el tratamiento en la próxima cita hasta agosto cuando ya me tocaba la etapa de los peeling. Usaba solución de Jessner y ácido setalicílico (creo que se escribe así) al 15% que preparan en la facultad de medicina de la Universidad Central de Venezuela. Todo muy bien, hasta el 6 de noviembre de ese mismo año que me dió la cita para un mes casi, el 4 de diciembre, pero resultó que el día anterior hubieron elecciones presidenciales, y aquí, siempre, pero siempre, el día posterior a cualquier elección es como si fuese festivo o no laboral. Yo no asistí por eso, sino que estaba muy lejos y los ánimos políticos se encontraban algo caldeados ese día.
Pues llegó el 2007, no pedí mi cita el 15 de enero que es cuando abren el hospital, sino fui en febrero, cuando tuve tiempo y me acordé de ir para "no dejar", que era básicamente por no repetir el rebrote de 2004 y 2006. Me dieron la cita lejísimos, para el 4 de mayo, pues qué le vamos a hacer, llegó ese día y fui con mis peelings viejos de noviembre pasado los cuales no me hicieron mucho efecto, también por estar mal conservados (no se deben dejar a la luz, de ningún tipo). Tuve en total como 4 peelings desde mayo hasta septiembre, todo iba muy bien, yo estaba tranquilo ya que, como un amigo estuvo también en esas y la etapa de los peelings fue su etapa final del tratamiento.
El 21 de septiembre de 2007 fue mi último peeling, como estaba bien, el doctor me recomendó la cita para Enero del 2008, pero yo, siempre tan dormido, tan flojo de hacer las grandes colas que se hacen aquí para pedir una cita médica, no fui sino el 11 de marzo, logré la cita para el pasado 29 de abril.
Llegó ese día, me tocó la doctora que actualmente me ve, el doctor que me tocó es ahora supervisor de todos los consultorios de dermatología del hospital. Al principio, me pareció un poco indelicada la actitud de la doctora en referirse a mis granos de la cara como algo preocupante, pero como yo ya estaba curado de eso emocionalmente, simplemente argumenté que la cara que tenía y aún tengo mientras les escribo esto, con pocos granos, fastidiosos, algo rojiza pero poco, es una maravilla con respecto a cuando tenía 14 ó 15 años, o cuando los demás rebrotes mencionados anteriormente.
La doctora me asustó con la posibilidad de usar el Roacután. Pero primero debía hacerme unos exámenes de sangre, incluyendo el de HIV para asegurarse que estoy apto para tomar ese medicamento. Yo, cuando tuve el rebrote del 2006, indagué en la red sobre este medicamento y me leí todos los foros, exclusivamente todos al respecto, y recordando muchas de las experiencias ajenas me asusté, y todavía lo estoy un poquito, sobre todo por el efecto secundario del acné fulminante, que no me gustaría vivir, y de vivirlo, que sea por poco tiempo.
Bueno, retomando el hilo, me mandó la Doxiciclina de 100 mg nuevamente, por 6 semanas para mermar un poco los granos de la espalda que tenían tiempo bastante alborotados y fue la principal razón de mi visita. También me recetó la Zudenina Crema, la cual aún me queda y el protector solar Umbrella de siempre y un jabón que me habían mandado cuando la etapa de los peeling que olvidé mencionar, Dermotivín Jabón.
Mi próxima cita fue para el día 10 de junio del presente año, o sea, ayer. Mis temores fueron esclarecidos y me recetó al fin el Roacután. E inclusive me lo dijo el doctor que me había tratado anteriormente que ahora es supervisor. Yo comenté que temía del efecto secundario del rebrote, lo demás estaba y sigo estando dispuesto a aceptarlo, y me adecuaron una dosis diferente la del primer mes a la del segundo. Pero eso será tema de la próxima entrada del blog.
Recuerdo bien la fecha, 26 de agosto de 2003, mi esperanza de mejorarme me llenó de optimismo sin aún tener lo que me recetó la doctora que me tocó en aquella ocasión:
- Tremesal de 100mg, 2 veces al día por 1 mes y después 1 diaria por 2 meses.
- Benzac (Peróxido de Benzoilo) crema al 5% todas las noches.
- Jabón Neutrógena, especial para pieles grasosas (uno de etiqueta naranja).
- Umbrella Gel SPF30.
Pues al mes, había mejorado notablemente, y al cabo de dos meses más (la cita la tuve bien lejos) había mejorado, pero, aproximadamente 15 días antes de la cita pautada, en mi familia hubo una situación económica delicada, la cual, no nos permitió costear la crema Benzac, la cual era algo costosa para aquel entonces y estuve ese tiempo sin ponérmelo (ya para entonces no me tomaba la pastilla Tremesal). Surgió un rebrote feo, el cual, cuando tuve la cita con mi doctora el 18/12/2003 me recetó Benzac al 10% y otra crema diurna que no recuerdo ahorita su nombre.
El año 2004 fue de mil maravillas para mí, estaba graduándome de la secundaria, y mi cara estaba de un bien que ni les cuento, por lo menos los primeros 10 meses. Como ya mi acné se había reducido a un mínimo perfectamente tolerable, el tratamiento dejé de usarlo pausadamente. Mi dermatóloga sólo me recomendó usar el peróxido de benzoilo únicamente cuando saliese un grano, del resto no hacía falta sino la crema diurna y el protector solar.
Ese año 2004, tuve apenas dos citas, el 11 de marzo y el 11 de mayo, las cuales fueron normales y el tratamiento no lo recuerdo perfectamente pero sé que fue como lo describí en el párrafo anterior. Sin embargo, mi dermatóloga quería tenerme seguimiento al caso y me citó nuevamente para el 9 de agosto. Ese día, de tan mala suerte para mí, y por mala costumbre de dejar todo para última hora, extravié mi tarjeta de las citas del hospital, y yo, empecé a buscarla justo una hora antes de la referida cita. Como no la conseguí, simplemente lo dejé así y no fui a la cita, confiado ya, que mi cara estaba "bien", relativamente en comparación a como estaba antes.
Para el hospital, no volví más, no por falta de tiempo, sino por flojera y por ser confianzudo. Empecé los estudios en la universidad y a la semana se me presentó un rebote, monumentalmente preocupante, pero en vez de pedir cita, volví a comprar los remedios de las citas anteriores y se fueron aplacando lentamente, tomé las pastillas sin prescripción alguna ya que aquí las venden así y bueno al cabo de tres meses, en enero de 2005, estaba relativamente bien con respecto a los tres primeros meses de la universidad (octubre-diciembre).
Todo el año 2005 me la mantuve ocupado, y mis tiempos libres se los dedicaba a ver películas, tomar con mis amigos, lo normal, mi cara no fue factor preocupante hasta finales de ese año. Al notar que ya las pastillas no hacían efecto, dejé de tomarlas y me embadurnaba la cara con el Benzac al 5% que me ardía pero sí medio controlaba la cosa. A mediados de enero del 2006 creo que tuve el peor rebrote jamás visto a mi parecer, horrible a los lados de mi cara grandes, de tal forma que ni me podía afeitar porque siempre le sacaba un tajo a algún grano, Dios que frustrante todo eso, y sobre todo por la gente preguntando y "recomendando".
Tuve mi cita en febrero, me tocó otro doctor y bueno me recetó Doxiciclina de 100mg, Solugel al 0.4% creo que era y para las marcas grandes Stievamycin al 0.025% (color vinotinto la franja de la caja y tubo). Al cabo de 3 meses había mejorado, y había irrespetado la toma del antibiótico que era cada 12 horas por las farras y la tomadera de cerveza, todo eso hasta la próxima cita que fue a finales de abril del 2006.
Como mi mejoría fue buena, el doctor prosiguió con el tratamiento en la próxima cita hasta agosto cuando ya me tocaba la etapa de los peeling. Usaba solución de Jessner y ácido setalicílico (creo que se escribe así) al 15% que preparan en la facultad de medicina de la Universidad Central de Venezuela. Todo muy bien, hasta el 6 de noviembre de ese mismo año que me dió la cita para un mes casi, el 4 de diciembre, pero resultó que el día anterior hubieron elecciones presidenciales, y aquí, siempre, pero siempre, el día posterior a cualquier elección es como si fuese festivo o no laboral. Yo no asistí por eso, sino que estaba muy lejos y los ánimos políticos se encontraban algo caldeados ese día.
Pues llegó el 2007, no pedí mi cita el 15 de enero que es cuando abren el hospital, sino fui en febrero, cuando tuve tiempo y me acordé de ir para "no dejar", que era básicamente por no repetir el rebrote de 2004 y 2006. Me dieron la cita lejísimos, para el 4 de mayo, pues qué le vamos a hacer, llegó ese día y fui con mis peelings viejos de noviembre pasado los cuales no me hicieron mucho efecto, también por estar mal conservados (no se deben dejar a la luz, de ningún tipo). Tuve en total como 4 peelings desde mayo hasta septiembre, todo iba muy bien, yo estaba tranquilo ya que, como un amigo estuvo también en esas y la etapa de los peelings fue su etapa final del tratamiento.
El 21 de septiembre de 2007 fue mi último peeling, como estaba bien, el doctor me recomendó la cita para Enero del 2008, pero yo, siempre tan dormido, tan flojo de hacer las grandes colas que se hacen aquí para pedir una cita médica, no fui sino el 11 de marzo, logré la cita para el pasado 29 de abril.
Llegó ese día, me tocó la doctora que actualmente me ve, el doctor que me tocó es ahora supervisor de todos los consultorios de dermatología del hospital. Al principio, me pareció un poco indelicada la actitud de la doctora en referirse a mis granos de la cara como algo preocupante, pero como yo ya estaba curado de eso emocionalmente, simplemente argumenté que la cara que tenía y aún tengo mientras les escribo esto, con pocos granos, fastidiosos, algo rojiza pero poco, es una maravilla con respecto a cuando tenía 14 ó 15 años, o cuando los demás rebrotes mencionados anteriormente.
La doctora me asustó con la posibilidad de usar el Roacután. Pero primero debía hacerme unos exámenes de sangre, incluyendo el de HIV para asegurarse que estoy apto para tomar ese medicamento. Yo, cuando tuve el rebrote del 2006, indagué en la red sobre este medicamento y me leí todos los foros, exclusivamente todos al respecto, y recordando muchas de las experiencias ajenas me asusté, y todavía lo estoy un poquito, sobre todo por el efecto secundario del acné fulminante, que no me gustaría vivir, y de vivirlo, que sea por poco tiempo.
Bueno, retomando el hilo, me mandó la Doxiciclina de 100 mg nuevamente, por 6 semanas para mermar un poco los granos de la espalda que tenían tiempo bastante alborotados y fue la principal razón de mi visita. También me recetó la Zudenina Crema, la cual aún me queda y el protector solar Umbrella de siempre y un jabón que me habían mandado cuando la etapa de los peeling que olvidé mencionar, Dermotivín Jabón.
Mi próxima cita fue para el día 10 de junio del presente año, o sea, ayer. Mis temores fueron esclarecidos y me recetó al fin el Roacután. E inclusive me lo dijo el doctor que me había tratado anteriormente que ahora es supervisor. Yo comenté que temía del efecto secundario del rebrote, lo demás estaba y sigo estando dispuesto a aceptarlo, y me adecuaron una dosis diferente la del primer mes a la del segundo. Pero eso será tema de la próxima entrada del blog.
Introducción (I): Recetas caseras y habladurías
Alrededor del acné hay tantos, pero tantos mitos, que es inútil discutirlos por aquí también, ya que si eres alguien que sufre o ha sufrido de este mal juvenil, debes sabértelos de memoria.
No hay nada que más moleste, o haga encabronar, cuando uno sufre de acné, son los comentarios quizás "preocupados" de terceros, Dios mío, eso es un karma. Sobre todo si uno está lleno, no importa la edad que tengas. Desde los molestosos amigos de uno (y hasta tu padres y tíos) que argumentaban que eso salía gracias a la masturbación, de la cual, yo llegué en un momento creí que era verdad por la incidencia en el asunto, y se creó una especie de sugestión, que cada vez que lo hacía, me salían, y es cierto que si uno se sugestiona por algo, le pasa. Ya todos sabemos que es totalmente falso.
Que si las comidas (no se alejan mucho de la realidad), tomar refrescos/gaseosas, y otras "razones" que no recuerdo en este momento, son un fastidio, pero se puede medio pasar, pero peor aún son los posibles "medicamentos caseros" que te recomiendan hacer. A continuación les citaré algunos (no quiere decir que no sirvan, ojo):
- Zumo de limón en la cara todas las noches.
- "Mamásana", esto es un ünguento veterinario para las aves.
- Pasta dental o dentrífico.
- Orina (hasta inclusive algunos jodedores decían que el propio semen).
- Flores de Manzanilla.
- Mascarillas de avena.
- Entre otros.
¿Cuáles me llegué a aplicar yo? (Algunas no las incluí en la lista anterior):
- Sebo de ovejo: Este se derretía en una cuchara (parecía que fueras a fumar crack jajaja) y el líquido parecido a la cera de vela derretida te la aplicabas en los granos y dormías con ello. A la mañana siguiente te lavabas con jabón y listo.
- Jabón azul: ¿quién no conoce el jabón azul? Para los que no lo saben, el jabón azul es un jabón en barra que se utiliza para lavar la ropa. En ciertos países, cuando no se cuentan con recursos monetarios suficientes, se utiliza éste mismo para bañarse ya que es como tan "nulo", o "inoloro" diría yo que se pasa. Pues bien, la estrategia era lavarse bien, con tal de hacer una capa espumosa bien gruesa, que luego debías dejar secar unos 5 ó 10 minutos y te lo quitabas. La resequedad que produce el jabón era el seguro remedio para evitar que seguirían brotando granos.
- Otros jabones: Jabón de azufre, jabón de avena, Neutrogena, etc. Ojo, no desmerito ningún jabón antes mencionado, pero sé que en casos menos relevantes, o muy leves, sí creo que funcionen, sin embargo, por más leve que sea, siempre es lo mejor ir a tu dermatólogo para que recete lo propio.
- Cremas: Desde la famosa crema "Sánalo", pasando por el ünguento veterinario "Mamásana" los resultados no fueron relevantes con respecto a los granos presentes.
- Mascarillas: llegué a colocarme mascarillas de avena con azúcar para exfoliar (me escamaban muchísimo la piel, pero sí reducían la irritación tan pronunciada que tenía), pencas de sábila o aloe vera, para hidratar y como, noté más granos, dejé de usarla (quizás era la depuración como la del roacután, pero era tal mi desespero que decidí suspenderlo).
- Vapor-ub: Bueno para las gripes, congestiones, llegué a colocarme en la cara creyendo que esa acción vaporizadora iba a sanarme. Fallo total.
Estas son las que recuerdo, vale destacar que todo esto pasó antes de mi primer cita al dermatólogo, cuyos tratamientos les mencionaré en otra entrada, ya que tengo que salir ahora.
No hay nada que más moleste, o haga encabronar, cuando uno sufre de acné, son los comentarios quizás "preocupados" de terceros, Dios mío, eso es un karma. Sobre todo si uno está lleno, no importa la edad que tengas. Desde los molestosos amigos de uno (y hasta tu padres y tíos) que argumentaban que eso salía gracias a la masturbación, de la cual, yo llegué en un momento creí que era verdad por la incidencia en el asunto, y se creó una especie de sugestión, que cada vez que lo hacía, me salían, y es cierto que si uno se sugestiona por algo, le pasa. Ya todos sabemos que es totalmente falso.
Que si las comidas (no se alejan mucho de la realidad), tomar refrescos/gaseosas, y otras "razones" que no recuerdo en este momento, son un fastidio, pero se puede medio pasar, pero peor aún son los posibles "medicamentos caseros" que te recomiendan hacer. A continuación les citaré algunos (no quiere decir que no sirvan, ojo):
- Zumo de limón en la cara todas las noches.
- "Mamásana", esto es un ünguento veterinario para las aves.
- Pasta dental o dentrífico.
- Orina (hasta inclusive algunos jodedores decían que el propio semen).
- Flores de Manzanilla.
- Mascarillas de avena.
- Entre otros.
¿Cuáles me llegué a aplicar yo? (Algunas no las incluí en la lista anterior):
- Sebo de ovejo: Este se derretía en una cuchara (parecía que fueras a fumar crack jajaja) y el líquido parecido a la cera de vela derretida te la aplicabas en los granos y dormías con ello. A la mañana siguiente te lavabas con jabón y listo.
- Jabón azul: ¿quién no conoce el jabón azul? Para los que no lo saben, el jabón azul es un jabón en barra que se utiliza para lavar la ropa. En ciertos países, cuando no se cuentan con recursos monetarios suficientes, se utiliza éste mismo para bañarse ya que es como tan "nulo", o "inoloro" diría yo que se pasa. Pues bien, la estrategia era lavarse bien, con tal de hacer una capa espumosa bien gruesa, que luego debías dejar secar unos 5 ó 10 minutos y te lo quitabas. La resequedad que produce el jabón era el seguro remedio para evitar que seguirían brotando granos.
- Otros jabones: Jabón de azufre, jabón de avena, Neutrogena, etc. Ojo, no desmerito ningún jabón antes mencionado, pero sé que en casos menos relevantes, o muy leves, sí creo que funcionen, sin embargo, por más leve que sea, siempre es lo mejor ir a tu dermatólogo para que recete lo propio.
- Cremas: Desde la famosa crema "Sánalo", pasando por el ünguento veterinario "Mamásana" los resultados no fueron relevantes con respecto a los granos presentes.
- Mascarillas: llegué a colocarme mascarillas de avena con azúcar para exfoliar (me escamaban muchísimo la piel, pero sí reducían la irritación tan pronunciada que tenía), pencas de sábila o aloe vera, para hidratar y como, noté más granos, dejé de usarla (quizás era la depuración como la del roacután, pero era tal mi desespero que decidí suspenderlo).
- Vapor-ub: Bueno para las gripes, congestiones, llegué a colocarme en la cara creyendo que esa acción vaporizadora iba a sanarme. Fallo total.
Estas son las que recuerdo, vale destacar que todo esto pasó antes de mi primer cita al dermatólogo, cuyos tratamientos les mencionaré en otra entrada, ya que tengo que salir ahora.
Prefacio
Saludos amigos, he creado este blog con la finalidad de ir relatando a través de estos 6 meses de tratamiento cómo va la erradicación de este mal tan fastidioso llamado acné. Lo vengo sufriendo desde los 13 años donde empezó a aparecer levemente, a los 14 estaba bien difuminado, a los 15 estaba en su punto clímax, a partir de ahí empecé a ir al dermatólogo y ha ido mejorando a tal punto que, a los 16 ya estaba erradicado en un 90% aproximadamente.
Luego de tener mi cara "limpia" simplemente dejé de ir al dermatólogo ya confiado, y empezando los 17, pero es que en un momentico, ni una semana de haber empezado clases en la universidad, tuve un repunte peor que cuando tenía 15, y se mantuvo así como por 3 meses, luego de lo cual, sin ir al dermatólogo, retomé arbitrariamente el tratamiento anterior que me había encomendado para la última cita que tuve a los 16 años y medio. El acné se controló mejor y era tolerable llevar el que tuve para mis 17... volví a caer en el círculo vicioso de no colocarme más nada y a los 18 años repuntó fuertemente, pero algo terrible que me hizo ir a pedir una cita en el hospital más cercano que lo trata, y que, en mi opinión, es el mejor del país que lo trata, y gratis.
Bueno, fui a mi cita, yo tenía 18 años, eso fue el 22 de febrero del 2006 y me mandó un tratamiento diferente (esta vez era un doctor diferente, tenia mas de año y medio sin ir), y me mandó algunos tratamientos tópicos y antibióticos. Al cabo de 6 meses estaba "bien" relativamente, pero yo seguí yendo. Llegamos al punto de ya usar peelings y yo (que ya conocía un caso de un amigo que estaba peor que yo por ventaja), sabía que estaba casi terminando
el tratamiento... hasta el año pasado tuve mi último peeling y todo iba muy bien con respecto a mi cara, a tal punto que la citas quedaron pospuestas para bien lejos y mi cara no necesitaba tales cuidados así. Pero mi espalda, que sufría de un acné leve, repentinamente se vió afectada por granos pustulentos y en algunos casos muy dolorosos y muy pegados el uno del otro.
En mi caso particular, no les di importancia, pero en muchos momentos se reventaban los granos y me manchaban las camisas, ni hablar las de color blanco. Especialmente me salieron en los lados laterales de los glúteos, dolorosos y hasta feos. Aplique mi tratamiento de la cara a estas zonas y se controlaron, pero no desparecieron y quedaron marcas como internas (aparentemente debajo de la piel).
Era hora de ir al dermatólogo, confieso que la flojera pospuso como por dos meses, recuperar la cita. Pero de eso, y de los tratamientos anteriores, serán tema de otra entrada a este blog.
Sean bienvenidos y gracias por leerme. Sólo espero que este blog sirva para todos aquellos que empiecen su tratamiento como yo, y se tranquilicen, o mejor dicho, sepan qué más o menos les puede esperar a lo largo del mismo.
Hasta pronto.
Luego de tener mi cara "limpia" simplemente dejé de ir al dermatólogo ya confiado, y empezando los 17, pero es que en un momentico, ni una semana de haber empezado clases en la universidad, tuve un repunte peor que cuando tenía 15, y se mantuvo así como por 3 meses, luego de lo cual, sin ir al dermatólogo, retomé arbitrariamente el tratamiento anterior que me había encomendado para la última cita que tuve a los 16 años y medio. El acné se controló mejor y era tolerable llevar el que tuve para mis 17... volví a caer en el círculo vicioso de no colocarme más nada y a los 18 años repuntó fuertemente, pero algo terrible que me hizo ir a pedir una cita en el hospital más cercano que lo trata, y que, en mi opinión, es el mejor del país que lo trata, y gratis.
Bueno, fui a mi cita, yo tenía 18 años, eso fue el 22 de febrero del 2006 y me mandó un tratamiento diferente (esta vez era un doctor diferente, tenia mas de año y medio sin ir), y me mandó algunos tratamientos tópicos y antibióticos. Al cabo de 6 meses estaba "bien" relativamente, pero yo seguí yendo. Llegamos al punto de ya usar peelings y yo (que ya conocía un caso de un amigo que estaba peor que yo por ventaja), sabía que estaba casi terminando
el tratamiento... hasta el año pasado tuve mi último peeling y todo iba muy bien con respecto a mi cara, a tal punto que la citas quedaron pospuestas para bien lejos y mi cara no necesitaba tales cuidados así. Pero mi espalda, que sufría de un acné leve, repentinamente se vió afectada por granos pustulentos y en algunos casos muy dolorosos y muy pegados el uno del otro.
En mi caso particular, no les di importancia, pero en muchos momentos se reventaban los granos y me manchaban las camisas, ni hablar las de color blanco. Especialmente me salieron en los lados laterales de los glúteos, dolorosos y hasta feos. Aplique mi tratamiento de la cara a estas zonas y se controlaron, pero no desparecieron y quedaron marcas como internas (aparentemente debajo de la piel).
Era hora de ir al dermatólogo, confieso que la flojera pospuso como por dos meses, recuperar la cita. Pero de eso, y de los tratamientos anteriores, serán tema de otra entrada a este blog.
Sean bienvenidos y gracias por leerme. Sólo espero que este blog sirva para todos aquellos que empiecen su tratamiento como yo, y se tranquilicen, o mejor dicho, sepan qué más o menos les puede esperar a lo largo del mismo.
Hasta pronto.
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